TU SIRENA…
Querida sirena…
Me encontraste una tarde agonizante en el Mar de tus Poemas…
Y me devolviste a la vida, con tus locuaces aventuras…
Entre como nuevo…Entre en tu mundo, en tú Mar…
Me diste un bálsamo para sumergirme contigo…
En tú Océano del amor, del deseo, de la ternura, de la pasión…
Me llevas contigo bajo las colorinas aguas…
Y allí veo cientos de corazones rotos…
Vidas pertrechas, futuros inciertos…
En los buques de guerra varados en el fondo de tú Mar…
De las almas perdidas, pero también veo…
A los delfines de la alegría…
Veo los barcos de peces del amor… Y el coral de la eternidad…
Y los dos subimos a la realidad pero…
Tú no puedes venir a la arena…
Yo hablare con los Dioses…
Para que tú y yo podamos pasear…
Por las calas infinitas de la pasión…Por las playas sin limite del deseo…
La bahía de blanca y cálida arena de nuestro amor…
Pero vuelve a tú Mar…Quédate allí…
Con la concha que me diste te llamare…
Y tú vendrás a recogerme un día, esa será nuestra contraseña…
Para que acudas lo más rápida posible a por mi…
Y los dos vivamos en el Océano del bien que los dos hemos creado…
Una vida entre el amor, el deseo y la pasión…Una vida entre el Mar y la arena…
Nuestros cuerpos desnudos los dos en un castillo de atlantes…
Con un lecho de algas en el que fuimos pasto del amor…
Ese amor que deberíamos consumir…
Pasaran los días y más días en que los dos vivamos…
Con nuestros brazos, unidos a nuestra piel…
Como dientes de escualo que no quieren perder…
A la presa del amor…Que no se escapa, que esta…
Mis labios besando los tuyos…
Robarte de la concha de nácar de tu cuerpo…
La perla más preciosa que posees…
Es solo mía… Y se llama placer…
Erika…
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